Aquí estoy tumbado… mirando al cielo con ojos cerrados.
Rodeado de silencio que se viste de verdad o mentira,
de realidad o ficción.
Oscuridad arrogante que me disfraza de quien quisiera ser y no soy.
Sueño incesante que vuela alto como el viento…
Nostalgia de amigos olvidados.
Pasos errantes hacia el destino de aquellos tiempos perdidos.
Una estrella fugaz cae en mis manos sacándome de mi letargo.
Veo con asombro… el brillar de sus ojos… el calor de su presencia.
Muy quieta… con ternura me pregunta:
“Amigo… ¿Qué es la oscuridad?”
Y sentí que la oscuridad era… la nostalgia que dejan las ausencias o los olvidos.
Con un gran cariño la estrella me susurro…
“Silenciosos murmullos oigo en ti”.
“Y ni las lágrimas en tus ojos, ni la perdida presencia,
ni la agonía del momento,
ni el susurro de versos callados,
evitaran que sientas… que en la ausencia o en el olvido…
todos estarán en ti aunque no estén”.
Al alba se fue desvaneciendo mi estrella,
mientras me ganaba el sueño.
…Carlos Ortiz V…
Rodeado de silencio que se viste de verdad o mentira,
de realidad o ficción.
Oscuridad arrogante que me disfraza de quien quisiera ser y no soy.
Sueño incesante que vuela alto como el viento…
Nostalgia de amigos olvidados.
Pasos errantes hacia el destino de aquellos tiempos perdidos.
Una estrella fugaz cae en mis manos sacándome de mi letargo.
Veo con asombro… el brillar de sus ojos… el calor de su presencia.
Muy quieta… con ternura me pregunta:
“Amigo… ¿Qué es la oscuridad?”
Y sentí que la oscuridad era… la nostalgia que dejan las ausencias o los olvidos.
Con un gran cariño la estrella me susurro…
“Silenciosos murmullos oigo en ti”.
“Y ni las lágrimas en tus ojos, ni la perdida presencia,
ni la agonía del momento,
ni el susurro de versos callados,
evitaran que sientas… que en la ausencia o en el olvido…
todos estarán en ti aunque no estén”.
Al alba se fue desvaneciendo mi estrella,
mientras me ganaba el sueño.
…Carlos Ortiz V…
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